Imágenes urbanas

Por José Luis Barragán Martínez A ciencia cierta nadie sabe su nombre, simplemente se le conoce como el “Yayo”, tal

00Por José Luis Barragán Martínez Nueve años de noviazgo y nada, la gente empezó a hablar, nadie del rumbo podía

00Por José Luis Barragán Martínez Cuando Valentín regresó de su luna de miel, los compañeros de trabajo en aquella oficina

Por José Luis Barragán Martínez Para los habitantes de la calle Rancho Viejo la aparición de aquel hombre cuarentón fue

Por José Luis Barragán Martínez Al dar la vuelta a la hoja de los “económicos” se encontró con la foto

Por José Luis Barragán Martínez Cuando llegó el tiempo, porque la naturaleza tiene sus tiempos y no se puede evitar,

Por José Luis Barragán Martínez Sábado por la tarde, los albañiles hacen fila para recibir su paga semanal, conforme van

Por José Luis Barragán Martínez Domingo, diez de la mañana, llegan dos jóvenes de corbata y con una piedra golpean

Por José Luis Barragán Martínez De niño, a finales de la década de los 50 del siglo pasado, allá en

Por José Luis Barragán Martínez El barrio se estremeció ante la noticia que doña Ebodia y don Timoteo se habían