Anny Torres: Dos décadas de arte a través del teatro infantil
Por Karla Valenzuela
Aunque su trayectoria como actriz la comenzó hace 49 años, Anny Torres ha dedicado ya dos décadas, de manera ininterrumpida, a la dirección y difusión del teatro infantil en Sonora, a través de la Compañía El Mago de Oz; y su esfuerzo ha rendido frutos ciertos y duraderos no solo en esta tierra, sino también a nivel nacional.
“Hace 20 años, con gran entusiasmo y deseo de triunfar, un grupo de actores ya con amplia experiencia se unen a mi proyecto de crear una compañía de teatro que se dedicara exclusivamente a ofrecer sana diversión a chicos y grandes. Necesitábamos traer a los niños al teatro que en aquel entonces esporádicamente contaban con este tipo de espectáculos. Es por eso que se eligió adaptar cuentos clásicos infantiles que fueran del gusto de todo público”, expresó visiblemente emocionada Anny durante la ceremonia de entrega de reconocimiento como directora fundadora de la Compañía “El Mago de Oz”, en las recientes Fiestas del Pitic 2022.
Luego, explicó con detenimiento que, a lo largo de estos años, son incontables las funciones que han dado, y que la compañía que hoy se ostenta como de repertorio, tiene montados y vigentes siempre ocho cuentos clásicos, dos pastorelas, un cuento de navidad y dos obras para adolescentes.
Un esfuerzo enfocado en los niños
Pero, ¿qué motivó a Anny Torres a dedicar su vida personal y profesional a esto? Ella lo resume así: “Decidí dedicarme al teatro infantil cuando me di cuenta de que no había un grupo o compañía que ofreciera sana diversión a los niños y sus familias a través del teatro. Había en aquel entonces un ‘boom’ por el teatro bar y el adulto podía acudir a los bares a disfrutar de momentos de esparcimiento; en cambio, el niño se tenía que conformar con los espectáculos que esporádicamente llegaban a nuestra ciudad, la mayoría proveniente de la Ciudad de México y sin la calidad que merecía. En ese entonces trabajaba como promotora cultural del Departamento de Bellas Artes (de la Unison) y a mí acudían personas o empresas preguntando por espectáculos para niños y era triste decirles que no había. Entonces, con ayuda de un compañero actor y director, Eduardo Miranda, decidí que ya era hora de reiniciar este tipo de trabajo, que hacía años no se ofrecía en nuestra ciudad. La oportunidad se presentaba ya que Teléfonos de México había creado la Coordinación de Bienestar Social que tenía como objetivo ofrecer todo tipo de actividades artístico-culturales que apoyaran tanto al telefonista como a los usuarios. Es así como nace Comedia Dell’Arte, que durante tres años realizó giras por las ciudades más importantes del estado con obras para niños, auspiciadas por esa importante empresa”, recordó.
Explicó que, en el 2002, se cerró el capítulo de Comedia Dell’Arte y nació La Compañía de Teatro Infantil de la Universidad de Sonora.
“El proyecto es presentado al entonces rector de la Universidad de Sonora, Pedro Ortega Romero, y la autoriza de inmediato pues la propuesta era que la institución nos acogiera en sus instalaciones y los honorarios de los actores y producción saldrían de las ventas y temporadas que ofreceríamos. En el 2008, la Compañía decide cambiar de nombre pues acababa de fallecer el maestro Ramón Sevilla, quién desde la ciudad de México llegó con la producción y el libreto de nuestra primera obra, “El Mago de Oz”, misma que bajo su dirección se estrena el 10 de abril del 2002, y de ahí hasta la fecha, con forzosa pausa por la pandemia, la Compañía no ha dejado de trabajar, convirtiéndose en una compañía de repertorio, con obras de teatro infantil que recorren lo largo y ancho del estado, incluso han recorrido Sinaloa y Baja California Sur. Y el 2004, Pinocho El Musical se presentó en la 34 edición del Festival Internacional Cervantino”, rememoró agradecida con la Universidad de Sonora y, por supuesto, a los maestros universitarios, a los actores y actrices que trabajaron con ella en el comienzo de este proyecto y a su familia, que siempre la ha acompañado.
Merecida condecoración
Anny Torres es una persona sensible, creativa, entregada a su trabajo; como ella misma lo dice, desde que descubrió que el teatro existía y que dedicarse a él sería su profesión, “no hubo otra Anny Torres, la mujer que desea ofrecer su arte a todas las personas que se acercan a disfrutarlo, que lucha día a día por ser feliz haciendo lo que le gusta y que ha trasmitido ese amor por su trabajo a su familia, para lo cual se apoya en otra gran amante del quehacer teatral, mi esposo Cutberto López. Por eso, mis hijos han heredado nuestro gusto por el arte y en especial Cutberto hijo se ha convertido en un excelente creador teatral que actualmente cuenta con una beca del FONCA a nivel nacional para hacer lo que a él más le gusta: dirigir teatro; eso me hace sentir plena y satisfecha, y aunque la lucha ha sido larga y difícil y así como ha habido muchos éxitos, también puedo contar fracasos, estos me ha fortalecido para seguir adelante y creo que todavía tengo mucho por hacer en este camino que he escogido y del cual no me separaré mientras mi salud y mis años me lo permitan”, dijo.
Para ella, haber recibido el reconocimiento por su trayectoria en el teatro infantil por parte del Instituto Municipal de Cultura y Arte significa mucho.
“En muchas ocasiones y a pesar de que mi vida entera le he dedicado al teatro, la mitad de ella a los niños, había en mí ese hueco de que esto no era valorado en su justa dimensión por quienes están a la cabeza de las instituciones culturales, muchos años de trabajo que solo yo y mi grupo sabíamos lo que nos había costado. Mantener una compañía por 20 años no es fácil; sin embargo, la Universidad de Sonora siempre ha estado ahí para apoyarme y siempre reconoceré que, sin su ayuda, llegar a los 20 años no habría sido posible”, reconoció.
“Pero que de pronto te informen que serás reconocido en un festival de la magnitud de Fiestas del Pitic, que congrega a miles de gentes durante cuatro días, fue para mí una gran sorpresa y una muy grande satisfacción del deber cumplido, por fin alguien volteaba a ver tu trabajo y valora todo lo que has hecho durante 20 años y dices ‘esto sí ha valido la pena’. Todavía me lleno de emoción por los momentos vividos durante la entrega del reconocimiento, el cual compartí con todos mis compañeros, actores, directores, técnicos, amigos y en especial con mi familia, que gracias a que aguantan mis locuras y las apoyan hemos podido lograr que nuestro esfuerzo se vea coronado”, comentó con alegría.
“Agradezco enormemente la sensibilidad de la licenciada Marianna González Gastélum, Directora General del IMCA, que volteó a ver nuestra trayectoria como compañía y pensó en reconocerla en tan importante festival y, por supuesto, que al licenciado Antonio Astiazarán, Presidente Municipal de Hermosillo, que apoyó la propuesta”, continuó.
Anny aseveró que el arte en todas sus ramas, música, artes plásticas, danza y teatro, contribuyen enormemente a unirnos como sociedad principalmente porque son manifestaciones que nos sensibilizan como seres humanos.
“Escuchar música, un buen concierto, disfrutar de una buena coreografía, ver una hermosa pintura o disfrutar de una buena obra de teatro, nos traslada a otras dimensiones en donde como seres humanos logramos transformar nuestro interior para reflejar a un ser sensible y llenos de cualidades que solo podemos encontrar al disfrutar del arte”, indicó, y ella lo ha constatado a lo largo de dos décadas, principalmente con los niños, a quienes no únicamente les ha otorgado la oportunidad de conocer el teatro, sino que les ha mostrado el camino valioso que significa el arte para la construcción de una sociedad.
*Karla Valenzuela es escritora y periodista. Es Licenciada en Letras Hispánicas y se ha especializado en Literatura Hispanoamericana. Actualmente, se dedica también a proyectos publicitarios.