Celuloide: Pienso en Kaufman
Por Jesús Ricardo Félix
En estas fechas al inicio de la primavera está de moda irse a la playa a pesar de que el bicho ya cumplió un año de vida entre nosotros y no parece tener ganas de irse. En estas fechas al inicio de la primavera está de moda el béisbol y el semáforo verde de las autoridades que en plena campaña todo lo ven color verde como García Lorca. En estas fechas a inicio de la primavera el mundo se divide entre los que apoyan a Godzilla y los que apoyan a Kong. En estas fechas al inicio de la primavera nos dicen que Michel Foucault ya no es digno de leerse y Pepe Le Pew ha sido cancelado de por vida. En estas fechas al inicio de la primavera cada vez es más difícil encontrar narradores que rompan esquemas al estilo de los Fellini y los Buñuel y los Bergman ¿Y qué opciones tenemos? Reciclar un buen clásico o dejarnos atrapar por alguna serie con mucha acción que no nos haga pensar o sentir demasiado.
Es por ello que directores como los Coen, los Lynch y Lars Von Trier emergen de vez en cuando como un animal en extinción que aparece en distintas partes del mundo pero con menor presupuesto cada vez ¿Estamos acaso frente a la reggaetonización del cine? Lo cierto es que de vez en cuando aparece un narrador distinto, como el caso del buen Kaufman. Hay quien puede juzgarlo de pretencioso otros más de aburrido, algunos dirán que es un genio lo cierto es que Charlie Kaufman a lo largo de su carrera en el cine ha logrado construir una narrativa propia que logra distinguirlo del resto. De manera contradictoria puede que no sea el más original de los directores y es que en sus producciones siempre está haciendo referencia a escritores, películas, obras de teatro, musicales que se relacionan de alguna manera con sus historias o personajes. Pienso en el final es una película del 2020 escrita y dirigida por Kaufman que fue guionista de filmes como Being John Malkovich aquella historia donde una serie de personajes se peleaban por ser John Malkovich o la célebre Eternal Sunshine of the Spotless Mind donde Jim Carrey busca olvidarse de su relación con la alocada Clementine interpretada por Kate Winslet. Debuta como director con Sinécdoque, Nueva York donde aparecía el gran actor Philip Seymour Hoffman. En la película Pienso en el final, Charlie Kaufman elige a Jesse Plemons para interpretar a Jake, este actor es como el nuevo “Philip Seymour” tanto física como actoralmente, de verdad es sorprendente la similitud.
La película cuenta la historia de Jake y su novia Lucy, el personaje la lleva a cenar a casa de sus padres y la mujer en sus pensamientos se cuestiona sobre el presente y el futuro de su relación. Kaufman es un existencialista y a la vez un surrealista, le gusta jugar con los símbolos y se cuestiona lo absurdo de la existencia de manera constante a través de sus personajes verborreicos con pretensiones filosóficas. Hay que estar empapado de la literatura y filmografía anglosajona a la que recurre constantemente Kaufman, como un Woody Allen posmoderno, para poder seguirle el paso a los personajes. No sabemos si Jake se ha imaginado a Lucy desde un inicio y la va reconstruyendo conforme la historia avanza o si Lucy ha creado a su alter ego Jake y todo aquello no es más que la fusión de ambos personajes atorados en una grieta en el tiempo. Lo cierto es que el personaje de Lucy busca regresar a casa desde inicios de la película y no lo consigue, es una encrucijada Buñueliana difícil de entender, el musical de Oklahoma es un protagonista más como la tormenta de nieve y el marco de nostalgia trágico de los reencuentros con el sí mismo que nos propone Kaufman, la recomiendo siempre y cuando estés con humor de pensar mucho y entender poco, sentir la angustia, nostalgia o temor que transmiten los personajes retratados por el buen Charlie, el nuevo surrealista norteamericano.
