Reductio ad absurdum: Dólares de cabeza
Malasuerte
Hoy me topé con una nota acerca de la hiperinflación que aqueja a Zimbabwe, donde su moneda es prácticamente un chiste. Desde 2009 se han visto forzados a utilizar otras monedas debido al 5,000% de inflación que convertía la suya despreciable, y ese mismo año alcanzó el 230,000,000%, por lo que definitivamente tuvieron que adoptar el dólar americano como moneda oficial.
Zimbabwe solía tener un billete de un trillón de dólares zimbabwenses, así como uno de 10 trillones, pero hasta abril de 2016 el valor de un trillón era de apenas 40 centavos de dólar estadunidense.
Tan inestable era la economía que los precios cambiaban cada minuto, tanto debías pagar tu café antes de tomarlo, o corrías el riesgo de que subiera de precio en cuestión de minutos.
Todo esto se oye terrible y tan lejano, sin embargo no olvidemos cuando en 1993 nos recetaron los “nuevos pesos”, que no fue otra cosa mas que borrarle 3 ceros a nuestra moneda, de tal forma que mil viejos pesos (aquellos lindos billetes cafecitos con esta muchacha de la Cruz) se convirtieron es las adorables moneditas de a peso. Osea que en realidad una horchata de la michoacana cuesta $25,000 pesos… (no quiero imaginar una limonada del Starbucks).
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