viernes, abril 19, 2024
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Imágenes urbanas: El hombre del pozo

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Por José Luis Barragán Martínez
José Luis Barragán
Una de las bellezas más exquisitas para disfrutarse que tiene Sonora son sus atardeceres. Cuando el sol se esconde en el horizonte el cielo se torna de un color rojizo y anaranjado, tan hermoso, que no queda otra cosa más que decir: Dios existe.

En Hermosillo, por supuesto, disfrutamos más de esos atardeceres por estar cerca de la costa y no hay cerros que nos impidan disfrutar de esta indescriptible pintura natural.

Por eso anteriormente al Mar de Cortez se le llamaba Mar Bermejo, por el reflejo que hace en sus aguas el cielo de los atardeceres.




Precisamente al poniente de la ciudad se encuentra la invasión “La solución somos todos”, aunque el asentamiento humano es irregular el ayuntamiento ayuda con pipas de agua y hasta el carro recolector de basura pasa una vez por semana, las tomas clandestinas de luz “torean” una y otra vez a la Comisión Federal de Electricidad.

En esta invasión hay una imagen tempranera que vale la pena rescatar, se le puede ver exactamente por la calle Sasha Montenegro esquina con Margarita López Portillo.




Se trata de un hombre ordenado, amante de la higiene, que a falta de drenaje hizo un pozo por fuera del cerco de su casa de donde, todos los días por la madrugada y con una cubeta, saca y riega en la calle el agua de desecho producto de los quehaceres del día anterior que hizo su doña, a diferencia de los vecinos que simplemente mandan el agua sucia a la calle provocando hoyancos putrefactos y el mundo que se haga bolas.

Al principio solo tenía que agacharse, pero con el tiempo y al tener que raspar la natilla apestosa con una pala, el pozo se ha ido haciendo cada vez más profundo.

Por eso le dicen “El hombre del pozo”, el mismo que por las tardes también disfruta desde su poltrona de la puesta del sol, del cielo rojizo de Sonora hasta que oscurece, hasta que solo alcanza a ver el gran baldío de enfrente que se utiliza a manera de campo deportivo y que le han puesto por nombre: “No nos volverán a saquear”.




*Por José Luis Barragán Martínez, colaborador


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